LA XII BIENAL IBEROAMERICANA DE ARQUITECTURA Y URBANISMO (BIAU). México. Septiembre 2022


Se celebrará del 21 al 25 de septiembre en Ciudad de México y el Festival de Arquitectura y Ciudad MEXTRÓPOLI como escenario principal, y que este año se organizará con el lema “Habitar al margen”, ha seleccionado a la arquitecta y activista argentina Ana Falú como ganadora de la categoría Trayectoria.

Conversamos con la Arquitecta Ana María Falú a quien la Bienal reconoce una vida profesional comprometida con el desarrollo de proyectos arquitectónicos en el contexto iberoamericano, y con la contribución a la búsqueda de hábitats alternativos para un futuro urbano más inclusivo, sostenible y justo.

¿Quién es Ana María Falú? Un poco de su historia y vida profesional

Ana María Falú es tucumana, producto de la escuela pública, se formó en la Escuela Sarmiento UNT y se recibió de arquitecta en la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Nacional de Tucumán (FAU-UNT).

“Viví en Tucumán hasta que la Dictadura cívico militar nos exiló. La vida extramuros de la contención y el afecto familiar y amistoso provinciano se transformó en un infierno de miedos y peligros. Brasil, Holanda y Ecuador fueron parte del periplo de fines de los 70´ e inicios de los 80´. Volví feliz a bailar la Democracia cuando asumió el Dr. Alfonsín. Desde entonces me radiqué en Córdoba y soy parte de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) que me distinguió con el titulo de Profesora Emérita”.

Profesora titular de Arquitectura, investigadora de CONICET, fue la Directora del Instituto de Investigación de Vivienda y Hábitat de la misma FAUD-UNC. Actualmente dirige la Maestría de Gestión y Desarrollo Habitacional “Vivienda y Ciudad”.

Ana María Falú además es experta en los temas de Genero Hábitat, Vivienda y Ciudad, y dirige la ONG Centro de Información y Servicios Cono Sur (CISCSA) que trabaja sobre temas vinculados a Mujeres, Género y Feminismo en el campo de la arquitectura y el urbanismo.

Premio a la trayectoria BIAyU

En cuanto al significado que tiene recibir el Premio a la trayectoria de Bienal de Arquitectura y Urbanismo Falú reveló que “siento emoción y alegría, impensado, nunca lo imaginé. Ha sido fuerte ver mi nombre sumarse a la lista de premiados/a, la segunda mujer en la historia de la BIAU que recibe este premio tan prestigiado, después de Rosa Grena Kliass (Brasil)”.

Hoy se vuelve necesario repensar la Arquitectura, el Urbanismo y el Diseño en clave de inclusión y de género, destacando la creatividad y el compromiso en pensar en atributos urbanos de proximidad, de vitalidad, de participación plural, de la rica diversidad iberoamericana, para avanzar en los cambios radicales de las formas de habitar, tanto domésticas como urbanas.

¿A qué hace alusión el lema “Habitar al margen” y cómo te interpela ese slogan?

El lema “Habitar al Margen”, apela al debate ético y político Iberoamericano. Necesitamos hacer visibles las formas de habitar de las mayorías y poner en valor las resistencias de lo invisibilizado en el pensamiento y hacer de la Arquitectura y el Urbanismo. Dado que fue construido en la negación de muchos sujetos de la rica heterogeneidad social, producto de un pensamiento que ha universalizado al hombre blanco, joven, productivo y heterosexual, visión androcéntrica que deja a tantos sujetos de derechos por fuera.

Al mismo tiempo reconocer la concentración de riquezas, las obscenas brechas de desigualdades, pero no sólo, también los sujetos omitidos por la sociedad patriarcal: las mujeres y diversidades. Invitarles a incluirles desde el concepto de género, como sujetos de derecho de la vivienda, la ciudad, los servicios. Allí están las crecientes necesidades sociales, medioambientales, de la vida cotidiana; el cuidado y la reproducción social de la vida como continuidad de lo productivo, pensarlo juntos como parte de la estrategia de conciliación para un mundo mejor.

¿Qué crees que se pone en valor con este reconocimiento a tu trayectoria académica y tu compromiso social?

Creo que este premio tiene un reconocimiento que va mas allá de mi misma, que es resultado de una construcción colectiva internacional, un esfuerzo de décadas en el compromiso de poner en valor y hacer visibles a las mujeres como diferentes de los varones, y a las mujeres en sus diversidades étnicas, culturales, de identidades sexuales y tantas otras. Es decir significar lo plural, lo multicultural, las identidades de sexo-género.
También creo que justamente por la convocatoria “Habitar al margen”, se pone en valor la vida doméstica, los bienes comunes, lo colectivo por sobre lo individual.

Necesitamos imperiosamente instalar un debate ético y político Iberoamericano y global, sobre las formas de habitar de las mayorías y poner en valor las resistencias de lo invisibilizado en el pensamiento y hacer de la Arquitectura y el Urbanismo. La desigualdad en el centro de las agendas urbanas y de la arquitectura, los espacios públicos seguros, el transporte accesible en sentido material, simbólico y monetario. La vivienda para todos y todas.

¿Qué lugar ocupa la FAU-UNT en tu carrera, qué mensaje le das a los estudiantes actuales de arquitectura?

«La FAU-UNT es central en mi experiencia de vida, es la que me formó, el taller de arquitectura, Mitrovich primero, Abregú y Cuenya, Di Lullo, Jorge de Lassaletta, cuánta gente maravillosa, de profes, de arquitectos y arquitectas de compañeras y compañeros que me constituyen. Blanca “Chula” Saad la arquitecta del talento y rupturista, Carmen Pages de Hill, cantando en el tablero y enseñándonos el valor de los espacios. Eran pocas las mujeres y eran fantásticas profesionales. Las amistades, Mónica Soria que no está, Jorge Naval, Mario Fernández Bravo, Silvia Soria, Raúl Di Lullo, Luis Alvarez, Ernesto Cheade, tanta gente tan querida. Talento y amistades, que son parte de una misma».

«Al estudiantado, a jóvenes y “jóvenas” (como me gusta decir) cuiden la pasión y el compromiso. Tienen el privilegio de una magnifica educación pública, gratuita de la Argentina, usénla y cuídenla, cuídense ustedes mismos de ser fieles a los propios caminos. La pasión y el compromiso por lo que hacen y saber que no se llega solo, que es necesario priorizar lo colectivo por sobre lo individual en todas las escalas, también en la vida personal, aprender y trabajar en equipos».